Ya alcanzado el ecuador del curso, voy a ir poniendo por acá cuestiones e ideas que van surgiendo según avanzamos con los contenidos.
En la primera sesión abrí el curso explicando qué es el visual thinking, y por qué funciona. Cuatro pinceladas de las bases fisiológicas y la explicación de la teoría del código dual sirven para poner en contexto el aprendizaje que ocurre cuando usamos el dibujo como herramienta de pensamiento. Vimos los «rudimentos» del dibujo -líneas y formas sencillas que nos sirven para componer imágenes complejas. Este paso es necesario para poder practicar en las siguientes sesiones el dibujo de objetos, de humanos y de letras. También empezamos con la codificación de formas, líneas y flechas, que aportan al esquema de capas de significado y refuerzan la intención detrás de la toma de decisiones inherente al dibujo.
En la segunda sesión vimos una de las partes más interesantes del curso -que de hecho tengo montada como curso aparte- y es la rotulación. Vimos el dibujo de humanos y el retrato, el dibujo de letras, cómo escribir con distintos grosores y cómo distribuir las palabras en formas curvas. También avancé algo de la clasificación de los distintos tipos de esquemas, y me guardo el arma definitiva para la tercera sesión: la gramática vívida de Dan Roam.
En cuanto a las dudas y peticiones que surgieron a lo largo de las dos semanas, Marta, estudiante de psicología, me planteó a través del mail si había algún manual para estudiar visualmente los exámenes tipo test. No encontré bibliografía al respecto, pero sí pude darle algunas pautas que creo pueden resultar:
- es más fácil reconocer que recordar. Este tipo de memoria -entrenable, no olvidemos- es una maravilla. Ves algo y lo reconoces, es como la magdalena de Proust pero visual.
- el superpoder del lettering nos ayuda a elevar las palabras a la categoría de sexy -o atractiva o destacable. El tiempo y el esfuerzo dedicado a rotular las palabras ayuda a poner en marcha el código dual
- el sistema modular del zettelkasten. Adaptar el zettelkasten a un enfoque más dibujístico pero manteniendo la modularidad y la autonomía de las fichas que hagamos puede ser especialmente recomendable en esta circunstancia. Un híbrido entre el zettel y las flashcards
Con esos mimbres se hacen buenos cestos, pienso.
También Marina me envió un esquema que está usando para estudiar las oposiciones. Un esquema que tiene la virtud de estar hecho en un papel de buen tamaño (y por lo tanto puede expandir y analizar las ideas que contiene), y en el que hay una categorización inicial. Espero que cuando acabe el curso sus esquemas sean una herramienta potentísima para su aprendizaje permanente.
La semana que viene, más 🙂